Cada día elegimos adoptar una actitud orgullosa o una que considere a los otros mejor que nosotros. Cuando damos prioridad a las necesidades o deseos de otra persona antes que los nuestros, elegimos usar el atractivo vestido espiritual de humildad. Nuestra actitud de humildad es el resultado de nuestra voluntad rindiéndose a la voluntad de Dios. Él busca a los seguidores de Cristo que mueren diariamente para levantarlos para Si mismo y Su gloria. Entonces, como padres, exigimos o imponemos nuestra voluntad con menos frecuencia y buscamos Su voluntad de manera más consistente.
Para información sobre el Ministerio Padre de Corazón favor enviar correo electrónico a: [email protected] o visita nuestra pagina web: www.padredecorazon.org.