“No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad”.
2da. Juan 1:4
Por: Dr. Juan Puente
La vida de todo ser humano tiene diferentes etapas desde el nacimiento hasta el final de sus días. Cada una de estas etapas produce diferentes reacciones, sentimientos e incluso temores. Todavía recuerdo aquel lunes, 6 de marzo de 1995, cuando tuve la bendición de comenzar con esta responsabilidad de ser padre. Dios en Su gracia me ha concedido una linda herencia: tres preciosos hijos (véase Salmo 127:3). Ha sido una tarea muy satisfactoria y de gran gozo ver a cada uno de ellos crecer y sobre todo guiarles a la salvación en Cristo Jesús.
La bendición de ser padre es para toda la vida. Sin embargo, la oportunidad de instruir a los hijos es limitada donde en la mayoría de los casos ellos no estarán en casa toda la vida. Así que, se debe aprovechar toda oportunidad para sembrar una buena semilla en los corazones de los hijos en sus primeros años. La principal semilla que se debe sembrar es la Palabra de Dios. Este es un privilegio y responsabilidad que se le ha concedido a los padres (véase Deuteronomio 6:6-9).
Hay gran gozo en el corazón de los padres al saber que sus hijos caminan en la verdad, al ver que la semilla sembrada en sus corazones está dando fruto. Independientemente de la profesión que los hijos escojan, el caminar en la verdad será el mejor testimonio del hogar cristiano donde crecieron.
Dr. Juan Puente – México
Pastor Primera Iglesia Bautista Hispana, Pittsburg, Texas
Decano Del Departamento Hispano – Lousiana Baptist University.