Titulares de comienzo de semana-6 de Abril 2020: El número de personas diagnosticadas con el virus COVID-19 a nivel mundial es cerca de 1.3 millones. En Estados Unidos el total de casos confirmados a la fecha de hoy, Lunes 6 de Abril, es de más de 337,000 con un total de muertos de 9,653. 6.6 millones de personas solicitaron beneficio por desempleo un una semana. Las autoridades en Estados Unidos han indicado que las muertes debido a este virus pueden llegar o sobrepasar la cifra de 100,000. Por otro lado, un buen amigo de infancia y pastor en Ecuador me dice: “Los hospitales están colapsando. Los insumos médicos ya son escasos. Las funerarias no dan abasto para recoger las personas fallecidas en las casa y los familiares han optado por sacarlos a las calles. Esto parece una película que jamás imagine.” ¿Como encontrar paz en medio de tantas noticias tristes y desalentadoras como las que estamos escuchando a diario?
Vivimos en un mundo desconcertante, perturbador, alarmador. No hay garantía ninguna de paz externa. Ninguna institución nos puede garantizar seguridad. Solo da un vistazo a la historia de la humanidad y podrás validar lo que estoy diciendo. Pretendemos describir la paz con aquellas cosas que no son. Definimos paz como la ausencia de guerras, conflictos, adversidades, enfermedades, calamidades, etc.
En este tiempo tan alarmante, desconcertante y perturbador por el virus por COVID-19, conseguir paz no es fácil. ¡Lo puedo entender! Dondequiera que miremos, televisión, internet, medios sociales, nos enfrentamos cada vez más a razones por la cual pensar que no hay paz y hasta llegar a pensar si esta pandemia habrá de pasar pronto o si ha de traer más calamidades. Buscamos la forma de llenarnos de falsas seguridades y de paz temporera. Nos rodeamos de medidas de seguridad ante un mundo plagado de peligros no solamente físicos pero emocionales y espirituales. Ante la realidad de este mundo nos preguntamos, ¿Quién podrá protegernos?
La misma noche en que fue traicionado, Jesús les recordó a sus discípulos de la realidad de un mundo caído. Jesús mismo estaría por enfrentar la muerte…la horrorosa muerte en la cruz. El Señor los dejaría con una promesa de paz: “Les dejo un regalo: paz en la mente y en el corazón. Y la paz que yo doy es un regalo que el mundo no puede dar. Así que no se angustien ni tengan miedo.” ( Juan 14:27 NTV).
El mundo basa su paz en sus propios recursos. El mundo depende de la capacidad personal, pero el creyente depende de su relación espiritual con Cristo. En el mundo la paz es algo que uno espera lograr o alcanzar con esfuerzo; pero para el creyente la paz es un maravilloso don de Dios, que se recibe por fe. El mundo espera disfrutar de paz cuando hay ausencia de problemas; los creyentes disfrutan de paz a
pesar de las pruebas gracias al poder que proviene del Espíritu Santo. El pastor británico Alexander MacLaren (1826-1910) lo resume de esta forma: “La paz no viene de la ausencia de dificultades, pero de la presencia de Dios.”
El regalo de Jesús es de una paz que el mundo no puede dar y que «sobrepasa todo entendimiento». La verdadera paz la encontramos en nuestro Señor Jesucristo, todo lo demás esta en terrenos inciertos. Si Cristo está en nosotros y con nosotros tenemos todo lo que necesitamos. El y solamente El nos ha prometido paz duradera. Sus promesas nunca fallan. Te exhorto a que recibas la paz que solo Cristo puede dar en oración en el día de hoy: “No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarán la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús.” (Filipenses 4:6-7 NTV).
Esta paz que sobrepasa nuestro entendimiento esta siempre disponible para ti sin importar las circunstancias que te rodean. Toma un tiempo para ir en oración a nuestro amado Padre Celestial y pídele que Su paz sobreabunde en tu corazón.
Déjanos saber tu petición de oración. Queremos escuchar de ti. El Ministerio Padre de Corazón está para caminar contigo en todo tiempo.
Copyright 2020
Dr. Rafael (Rafy) Gutierrez
Director Padre de Corazón rafy@abidingfathers.org
Fuentes consultadas:
Wiersbe, W. W. Transformados en Cristo: Estudio expositivo del Evangelio Según Juan
