Los profesionales que trabajan en gerontología, el estudio de la salud, la psicología y la integración social y económica de las personas que se encuentran en la vejez, recomiendan a los abuelos que se mantengan activos, pero no solo con pasatiempos o los llamados “hobbies”, sino con trabajos que realmente sean suficientemente significativos para que no se sientan amargados, inútiles y con la sensación de que están perdiendo toda su experiencia, conocimiento, sabiduría y su valioso tiempo que parece acortarse muy rápido. He aquí un dato interesante, ya son muchas las empresas y universidades que se dan cuenta de que las personas que han sido obligadas a jubilarse, debido a su edad, tienen mucho que aportar todavía y ese hecho ha llevado a que, en un creciente número de organizaciones, se les pida que se queden y sigan activas aportando la formación y la experiencia de toda su vida, reconociendo que los jóvenes, que han venido a ocupar sus puestos de trabajo, aún no tienen experiencia. Como diría mi nieta, “well, duh”.
Eso no quita que, al llegar a ser abuelos, se quieran realizar cosas que siempre se han deseado hacer y que no se ha podido por múltiples circunstancias. Ahora es el momento de dedicarse a actividades que apetezcan y gusten lo suficiente como para no sufrir la sensación mencionada de estar perdiendo el tiempo. Es momento de que los abuelos disfruten de lo que tienen, afrontando cada día la vida, con vigor y optimismo, dando importancia a las pequeñas y las grandes cosas, intentando viajar, leer, caminar, practicar ejercicio de acuerdo con las limitaciones de la edad, cuidar la salud de forma un poco más diligente, hacer trabajos de voluntarios para ser de ayuda a personas más necesitadas que ellos y, sobre todo, no renunciar a vivir relacionándose bien con otros, no perdiendo nunca el contacto con la familia y con las amistades con las que compartimos inquietudes e intereses.
El Salmo 92: 12-14 nos dice: «Pero los justos florecerán como palmeras y se harán fuertes como los cedros del Líbano; trasplantados a la casa del Señor, florecen en los atrios de nuestro Dios. Incluso en la vejez aún producirán fruto; seguirán verdes y llenos de vitalidad.” Incluso en la vejez aun producirán fruto; seguirán verdes y llenos de vitalidad. Cuanto quisiera ver que en nuestras iglesias se valore la experiencia, conocimiento y sabiduría de nuestros hermanos y hermanas de la edad de oro en vez de asignarlos a un cuarto para entretenerlos con algunas manualidades y galletitas de dieta. ¡Tranquilo Rafy, Tranquilo!
Los que conocen de este tema, gerontología, aseguran que las personas mayores no responden, actualmente, a un perfil estereotipado ni semejante de vejez, como pasaba años atrás. Los abuelos, en general, se sienten y parecen muy jóvenes, son más independientes y necesitan sentirse activos, valorados y demandados mucho más que en épocas anteriores de nuestra historia. !Se les olvido decir que somos mas guapos y elegantes! ¡Órale, papá!
Hay muchos trabajos que pueden ser muy bien realizados por las personas mayores y que es necesario que esto se reconozca, y que afortunadamente, como ya hemos mencionado, son ya muchos los países avanzados en los que los trabajadores pueden quedarse en las empresas hasta que ellos quieran, ayudando, a los más jóvenes que empiezan, con sus conocimientos y experiencia. Nos consta que hay profesores universitarios y en seminarios teológicos, con edades muy avanzadas, que siguen enseñando, asesorando, orientando o, incluso, dirigiendo tesis doctorales. ¡Ojalá que en cualquier país del mundo estuviera claro, para todos, que los mayores tienen derecho a un trato digno y a la posibilidad de seguir activos, si así lo desean, sin discriminaciones, ni burlas, ni desprecios, por ser mayores!
La posibilidad de que los abuelos puedan usar las nuevas tecnologías es algo que no se debe limitar o discriminar. Son muchos los mayores que se sirven de sus nietos para adentrarse en el mundo, casi infinito, de las nuevas formas de trabajar con los ordenadores, el celular, el internet con la ventaja que las nuevas tecnologías aportan el no tener que moverse de la casa. Se puede decir, ciertamente, muchos abuelos pueden seguir siendo activos gracias a las posibilidades que les da la tecnología. Piensa en lo asombroso que es un abuelo o abuela que está absolutamente imposibilitado para salir a la calle, pero que pueda “salir virtualmente” todos los días, leer los periódicos, un libro, comunicarse con los nietos y familiares lejanos. ¡Qué maravilla! ¿Verdad?
Te espero en el próximo artículo de Herramientas de Papa. Mientras tanto, nos veremos en el barrio…un cafecito a la vez. Que Dios te bendiga abundantemente y seas de bendición para otros.
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Dr. Rafael (Rafy) Gutiérrez
Director/Pastor
Ministerio Padre de Corazón
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Fuentes consultadas y citadas: Martínez Vera, E., & Planagumà, C. (2016). Una guía para los abuelos de hoy.
